Desde la Musicoterapia hacia el Bienestar psicofísico
El estado de sufrimiento o enfermedad podría definirse como un bloqueo de nuestra vida, de nuestro sistema de comunicación con el mundo y con nosotros mismos y que puede ser amenazantes para la nuestra integridad física, emocional y mental.
El estado general de salud mental está íntimamente ligado a las emociones.
La música afecta directamente al sistema límbico, asiento de nuestras emociones, sin pasar por el filtro de nuestra parte más consciente (Neocorteza) y establece un contacto directo con las emociones y los sentimientos. Puede crear fácilmente acceso a una amplia gama de emociones, provocarlas o calmarlas. Las respuestas emocionales a la música están altamente individualizadas.
En musicoterapia, las emociones se vuelven audibles, lo que permite a la persona expresarlas, comprenderlas, trabajarlas, gestionarlas y aceptarlas. La expresión no verbal de las emociones se expresa en un entorno seguro.
El material de trabajo
El cuerpo y la voz son los primeros instrumentos musicales del ser humano. A través de la exploración corporal se puede desarrollar la creatividad, la conciencia, la capacidad de expresarse de manera diferente, el contacto consigo mismo y con los demás. En actividades como exploración y expresión corporal, libertad de movimiento, focalización en la respiración y relajación con música, se intenta crear un contacto con el yo profundo.
La musicoterapia puede ayudar los usuarios a adquirir técnicas de modulación de emociones más conscientes (estrategias cognitivamente correlacionadas) mediante la inclusión de su personalidad individual. Y estas estrategias de modulación de emociones evolucionadas podrían, a su vez, ayudar a transformar la imagen de uno mismo en una imagen adaptativa (saludable).
IMPROVISACIÓN
La creación musical, como la improvisación vocal e instrumental, permite una comunicación íntima con uno mismo, pero también con los demás, lo que facilita la conciencia del mundo interior, la canalización de sentimientos y el desarrollo de una libertad creativa y siempre única.
SONGWRITING
Escribir canciones puede ayudar a las personas a reflexionar sobre su pasado, presente o futuro, sobrellevar el dolor y el trauma y reflexionar sobre sí mismos, entre otros, ponerse en contacto con procesos de pensamiento inconscientes y proyectar sus sentimientos en la música.
PSICODRAMA SONORO
Consiste en la representación de experiencias autobiográficas a través de la improvisación sonoro-musical. La técnica del psicodrama se centra en particular en la experiencia de revisar y volver a visitar la esfera del Yo, experimentar episodios de la propia historia tanto en el lado emocional como cognitivo.
RELAJACIÓN CON MÚSICA
La evocación de procesos de imaginación o experiencias internas que genera la música permite a la persona dirigir su atención hacia sí misma y de tener una conciencia cada vez mayor de su respiración y su cuerpo.
LA MÚSICA COMO DIBUJO Y NARRATIVA
El papel de la persona es escuchar música y sumergirse en las imágenes que esa evoca, expresarlas en el dibujo y también en la narración posterior, gracias a la construcción de una historia.
Además de trabajo estrictamente musical se realizan ejercicios de análisis y elaboración verbal de los problemas que contribuyen al malestar especifico de la persona, con el fin de hacerse consciente de su origen para después llevar a cabo las actividades encaminadas a lograr la solución. Aceptarse significa reconocerse, valorarse y buscar siempre pequeñas mejoras para quererse cada vez más y vivir la vida de la mejor manera que podamos. La patología o incluso el simple estado de ánimo difícil en el que uno puede encontrarse no debería verse como un obstáculo sino como un punto de partida hacia lo mejor de uno mismo